“LA PIEL TIENE MEMORIA” Adagio. Natalia Santos 

Lavandería Merlín (Carrer dels Vigatans 2, Barcelona) | 29/07, 19:30 h

La piel es un diario que recoge todo lo que ocurre en el tiempo. Mi madre siempre me decía de pequeña “la piel tiene memoria”.  Y yo entonces creía que era una de esas exageraciones que soltaba una madre para que tuviera un poquito de miedo y usara crema de sol. Sin embargo, ahora con la distancia que da el tiempo, me doy cuenta de que ella tenía razón. 

En el marco de La ciudad saludable, un ciclo de acciones en torno a la lavandería Merlín (Carrer de Vigatans, 2) NOMEVOY presenta la exposición “La piel tiene memoria” de la artista Natalia Santos. A través de la pintura, la artista presenta la piel como umbral que aborda cuestiones como el racismo, la estética y la identidad, así como otras problemáticas sociales. 

La piel lleva consigo experiencias vividas. En las cicatrices, los lunares, las arrugas, las manchas, las quemaduras… Todo ello son huellas que el tiempo deposita sobre el cuerpo.

Al fin y al cabo, la piel no se muestra lineal frente al tiempo. Con el agua se arruga. Ante el frío se eriza. Bajo una larga exposición al sol se quema. 

En las telas encuentro analogías directas con la memoria de la piel. Estas envuelven el cuerpo transformándose en una segunda capa que lo protege y lo conecta con lo que le rodea. 

Es ese fino elemento que delimita el fuera del ser y el a dentro. Un pedazo de piel que se desgasta, se arruga, y envejece con el tiempo.

Natalia Santos es una artista visual española dedicada al estudio de la piel y el cuerpo humano. Su trabajo se fundamenta en una perspectiva crítica y experimental,  con la que observa, cuestiona e interpreta la presencia física y simbólica que la piel ocupa dentro del mundo contemporáneo. Sus obras han formado parte de diversas exposiciones a nivel nacional, destacándose; Unsubmissive gazes, FLIPA  Art Gallery, Barcelona (2023), Quatre femmes,  ARZ Gallery, Bilbao (2023) AE22, Sala de cultura Bizkaia Aretoa, Bilbao (2022)

Su reciente trabajo ha sido galardonado por el  Museo Pinacothèque de Luxemburgo, con el Certificado de Mérito Artístico Luxembourg Art Prize 2022.